Las manos de Inma consiguen este otoño/invierno volver a hacer realidad los sueños de sus clientas, y es que ella es la artífice de cada uno de los modelos que nacen bajo el sello de La percha de mi bebé. Una marca de moda artesanal que, con cada nueva colección, crece un poco más, llenando de modelos increíbles, con telas que parecen salidas del dibujo de un artista, el armario de todos nuestros pequeños y pequeñas.
Y es que Inma, en esto de la moda infantil, se atreve con todo. En una temporada iniciada con babis de ensueño, en los que no han faltado los cuellos a contraste, los botones forrados y un sinfín de detalles que les ha valido un buen número de alabanzas. A ello se suman los primeros pedidos que salen del taller de La percha de mi bebé, prendas que hacen posible el deseo aquellas mamás y aquellos papás que quieren presumir tanto de hermanos coordinados como de hermanas conjuntadas que se conviertan en el centro de todas las miradas.
Tartán, vichy, bordados, seersucker, dibujos… las opciones son muchas y las ideas y las posibilidades casi infinitas, gracias al talento de Inma, y sus ganas, que hacen posible que cada prenda disfrute de una luz y una esencia especial, que siempre recuerda a La percha de mi bebé. En esta temporada, las blusas, las faldas, los petos y los cubres vuelven a convertirse en los protagonistas de esta marca de moda infantil artesanal, gracias a cuellos dobles, botones forrados, telas en contraste y detalles que hacen que cada modelo sea una pieza única y exclusiva.