La nueva temporada de Petite Coppelia es volar. Volar, como siempre, a un mundo lleno de belleza y dulzura, que no entienden de otra manera. Porque cada una de sus prendas, cada uno de sus diseños, es un canto a lo bonito, a lo delicado, a lo elegante y a lo especial.
Una moda infantil que no se entiende sin esos detalles que convierten un vestido en único. Sin esos nidos tan increíbles que son su mejor carta de presentación, ni sin esos cuellos que dibujan mil y un escenarios: todos ellos diferentes, pero tan parecidos, tan elegantes y tan sencillos a la vez.
Petite Coppelia ha vuelto a sorprendernos esta primavera/verano con un vichy absolutamente espectacular, unas rayas atemporales, unas flores tan llamativas como dulces y un escapulario en amarillo que, sin duda, se ha convertido en su joya de la corona. Otra temporada para el recuerdo de una firma de moda infantil que consigue enamorarnos a cada paso.
