Una temporada más, Florietta es una fiesta. Su forma de entender la moda infantil, poniendo el detalle a los diseños más especiales con telas en contrate, es una de sus mejores apuestas. Los estampados de dibujos se mezclan con el vichy, el tartán o los básicos, dando forma a unas colecciones en las que no falta imaginación.
Bolsillos, cuellos y lazos que encajan a la perfección en cada una de las prendas, camisas, jesusitos, pichis y petos que visten a los más pequeños de la casa. Prendas en las que, cuando firma Florietta, nunca faltan los volantes, los botones bonitos y los bordados especiales.
Un estilo propio que ha convertido Florietta en una marca con esencia, con sello de autenticidad, que ya ha llegado a las tiendas, causando sensación entre unos clientes que premian la calidad, el buen hacer y el sueño de vestir a niños y niñas de todo el país, empezando por Asturias. Allí es donde comienza esta aventura, donde crece y donde sigue, con esta nueva temporada a la que aún le quedan secretos por desvelar.