La magia que desprende Magnolia Olivia es infinita, tanto como lo es la creatividad de su motor, Olivia, y de la que es su fuente de inspiración, Magnolia. Juntas han dado forma a un rincón por el que es imposible pasar sin detenerse, porque los diseños, los tejidos y la esencia que allí se dan cita son, en todos los sentidos, mágicos. Justo como sus turbantes hechos a mano te hacen sentir.
Magnolia Olivia es un universo de belleza y dulzura en el que encontrar ese turbante que te hace brillar y vibrar, con texturas que envuelven al tacto, colores que paralizan a la vista y olores que transmiten la misma calma y armonía que la voz que atiende cada una de las peticiones. Y es que Olivia no deja ni un detalle al azar, siempre con un estilo desenfadado, libre… tan ‘freestyle’ como cada una de sus pequeñas clientas.
Una esencia que se muestra, más que nunca, en la que es la colección más personal y sincera de Magnolia Olivia, con lazos tan imposibles como maestros, con unos tonos que nadan entre el color y la neutralidad, y con el espíritu más independiente que nunca. Una libertad total de creación inspirada en esa creatividad que la hace única y que convierte esta marca en uno de los referentes de turbantes hechos a mano de la moda infantil, pero también en un derroche de estilo.
Y es que las fotos de Magnolia Olivia, al igual que sus creaciones, así como las otras marcas que se dan cita en su tienda online, cumplen con esos parámetros de exquisitez que hacen que no solo sea un regalo para la moda infantil, sino también para los amantes del buen gusto. El juego de texturas, las flores cuidadosamente seleccionadas y maravillosamente colocadas, naciendo de la imperfección más perfecta y con la intuición como mejor guía, hacen que disfrutar de este arte sea un placer en cualquiera de sus dimensiones.
